Concesionamos nuestra Voluntad a la realización de un paradigma que nos ha sido ingrato con sus promesas de «desarrollo», ante todo material.
Concedemos nuestra energía vital al sostener una realidad, por lo mismo, mediocre en donde acostumbramos resignar nuestros Sueños acomodándoles a tacañas versiones que se le asemejan,
pero que sinceramente (sin ser la mente), no Es.
Apariencias que parecen Ser.
La mente y sus juicios de valor
la razón justificando la conformidad a la tantas veces desabrida norma de realidades sucedáneas.
Nuestro Sentir nos devuelva la honestidad
y nuestro Corazón el valor de latir en la existencia para colmarnos de Vida.
A la Vida le corresponda nuestra energía vital, nuestra Voluntad de vivir.
Animando (dando Alma) a cada paso sobre esta Tierra Sagrada y su oportunidad el el tiempo
y concebir mayores vuelos en sus Cielos de visión amplia.
Contempla el brillo en los ojos de la muerte
y que su bondad te recuerde la virtud de la vida en todo su esplendor
En la mediocridad va agonizante nuestra oportunidad,
obviando el Misterio que nos ha dotado al llevarnos entre sus formas.
Baja de lo que te lleva lejos.
Haz Presencia y disfruta la amable compañía de nuestra finita eternidad.
Vamos en son de Paz despertando a la Consciencia